EL ALCALDE DE REQUENA SE ABSTIENE ANTE EL PLURILINGÜÍSMO.
El alcalde de Requena, el socialista Mario Sánchez, se ha abstenido en la votación de las dos mociones presentadas por PP y PRyA contra la implantación de la ley de plurilingüismo en la educación. Su grupo del PSOE en el Ayuntamiento y el representante de Podemos han hecho lo mismo.
El alcalde de Requena se ha lavado las manos. No le gusta la ley que impone el valenciano, pero tampoco la rechaza con la firmeza necesaria. Querer complacer a sus jefes de partido y no erosionar más su imagen ante el vecindario es una decisión difícil de tomar. Estar en el plato y en las tajadas es complicado.
La Asociación para la DEFENSA DEL CASTELLANO ruega a Mario Sánchez que actúe como alcalde de Requena antes que como representante de su partido político. Requena es castellano-hablante y no merece que a sus familias se les imponga una lengua que no es la suya. Mario Sánchez, representando al PSOE de Requena, debe dar un paso más posicionándose en contra de la imposición lingüística, a favor de su pueblo.
Mario no debe seguir el ejemplo de sus colegas de partido en Utiel, Camporrobles o Siete Aguas, que no se han atrevido a desobedecer las órdenes de los mandos del Palacio de la Generalidad, regidos por el Consejero de Educación, el nacionalista Vicent Marzá, propulsor de la sustitución de la lengua de Cervantes por la de Jordi Pujol en el sistema educativo requenense.
Peor es el caso del Ayuntamiento de Sinarcas que considera que la sustitución del valenciano normalizado por la lengua autóctona de sus ciudadanos en el colegio de su municipio no es una cuestión municipal.
La Asociación para la DEFENSA DEL CASTELLANO implora al alcalde de Requena Mario Sánchez que escuche a sus ciudadanos y rechace la Ley 4/2018 de febrero de la Generalidad sobre el plurilingüismo que promueve la incorporación progresiva del valenciano normalizado en el sistema educativo valenciano a costa de la lengua española, nuestra lengua.
